
Tabla de Contenidos
- Introducción
- ¿Qué son los ácaros y por qué afectan los cultivos?
- Cómo identificar una infestación de ácaros
- Manchas y telarañas: Primeras señales de alerta
- Uso de la lupa: Detectando los ácaros en las hojas
- Métodos naturales para eliminarlos
- Acaricidas químicos: ¿Cuándo usarlos?
- Prevención: Control de humedad y ventilación
- Ácaros depredadores: Aliados contra la plaga
- Conclusión
Introducción
Los ácaros, especialmente la arañuela roja, son una de las plagas más molestas y difíciles de controlar en los cultivos.
Son insectos diminutos que se alimentan de la savia, debilitando la planta y causando manchas amarillentas, hojas secas y en casos graves, la muerte del cultivo.
Detectar a tiempo su presencia es clave para evitar daños severos.
En este artículo te enseñaremos cómo identificarlos y eliminarlos eficazmente mediante métodos naturales, químicos y biológicos, asegurando que tu cultivo se mantenga saludable.
1. ¿Qué son los ácaros y por qué afectan los cultivos?

Los ácaros son artrópodos microscópicos que viven en el envés de las hojas y se alimentan de la savia de las plantas.
La arañuela roja (Tetranychus urticae) es una de las especies más comunes y problemáticas, especialmente en ambientes secos y cálidos.
Esta plaga se reproduce rápidamente, por lo que una pequeña infestación puede convertirse en un problema grave en pocos días si no se controla a tiempo.
2. Cómo identificar una infestación de ácaros

Los ácaros son difíciles de ver a simple vista, pero hay señales clave que indican su presencia:
- Puntos amarillos o blanquecinos en las hojas.
- Telarañas finas entre las hojas y tallos.
- Decaimiento general de la planta.
- Hojas secas, enrolladas o que caen antes de tiempo.
Si observas alguno de estos síntomas, es importante actuar de inmediato para evitar que la plaga se propague.
3. Manchas y telarañas: Primeras señales de alerta

Uno de los signos más evidentes de la presencia de ácaros es la aparición de pequeñas motas amarillas en la superficie de las hojas.
Estas manchas son causadas por la succión de savia y pueden extenderse rápidamente por toda la planta.
Si la infestación es avanzada, notarás telarañas finas entre los tallos y hojas. Estas redes protegen a los ácaros de los depredadores y dificultan la aplicación de tratamientos.
4. Uso de la lupa: Detectando los ácaros en las hojas

Dado su tamaño diminuto, los ácaros pueden pasar desapercibidos en una inspección rápida. Para confirmarlo, usa una lupa de aumento (10x o más) y revisa la parte inferior de las hojas.
Si ves pequeños puntos rojos, marrones o translúcidos moviéndose, entonces tu cultivo está infestado de ácaros.
5. Métodos naturales para eliminarlos

En infestaciones leves, puedes usar tratamientos caseros para reducir la plaga:
- Lavar las hojas con agua jabonosa (una cucharada de jabón neutro por litro de agua).
- Aplicar extracto de neem, que es un insecticida natural efectivo contra los ácaros.
- Rociar una mezcla de ajo y chile en agua, ya que los compuestos de estas plantas repelen la plaga.
Estos métodos pueden ayudar en casos leves, pero si la infestación es avanzada, será necesario un control más agresivo.
6. Acaricidas químicos: ¿Cuándo usarlos?

Si los métodos naturales no funcionan y los ácaros siguen propagándose, es recomendable utilizar acaricidas específicos. Algunas opciones incluyen:
- Acaricidas a base de abamectina, que atacan el sistema nervioso de los ácaros.
- Azufre mojable, que es un tratamiento efectivo y menos agresivo con el ambiente.
Es importante rotar los productos para evitar que los ácaros desarrollen resistencia y aplicarlos en el envés de las hojas, que es donde suelen esconderse.
7. Prevención: Control de humedad y ventilación

Los ácaros prosperan en ambientes secos y calurosos. Para prevenir su aparición:
- Mantén la humedad relativa por encima del 60%, ya que los ambientes húmedos dificultan su reproducción.
- Mejora la ventilación del cultivo, utilizando ventiladores o abriendo ventanas en cultivos indoor.
- No reutilices sustratos infestados, ya que los huevos de ácaros pueden permanecer activos durante semanas.
8. Ácaros depredadores: Aliados contra la plaga

Si buscas una solución biológica y ecológica, puedes utilizar ácaros depredadores como Phytoseiulus persimilis, que se alimentan de la arañuela roja sin afectar a las plantas.
Este método es ideal para cultivos orgánicos o cuando se quiere evitar el uso de químicos.
Conclusión

Los ácaros pueden ser una de las plagas más destructivas si no se detectan a tiempo.
Monitorear regularmente las hojas, mantener un ambiente húmedo y actuar rápido ante los primeros signos es clave para evitar que la infestación se propague.
Además del control de plagas, es fundamental contar con un buen sustrato que permita un crecimiento saludable de las plantas, ya que un cultivo fuerte es menos vulnerable a enfermedades y plagas.
Los cubos de lana de roca de 1.5” y 2” pulgadas son ideales para optimizar la absorción de nutrientes y oxigenación de las raíces, proporcionando un entorno más resistente ante posibles ataques de plagas.
Con la combinación de prevención, tratamientos naturales y control biológico, es posible mantener un cultivo libre de ácaros y asegurar plantas sanas y productivas.